Saturday, January 19, 2008

Mentira, mentira, adónde te fuiste?

Llegué a la esquina a la que tenía que llegar y cuando me iba a dar vuelta para deshacer mis pasos y volver a mi casa, decidí seguir adelante. No fue el azar lo que llevó a esta elección sino mi propia convicción de que necesitaba caminar. Caminar como un medio para pensar y despejarme. Caminar como camino cuando me bajo un par de paradas antes del colectivo para llegar despacito a mi casa, para retrasar esa vuelta a lo cotidiano, a lo de todos los días, todas las horas, la rutina.

Hoy no quise volver al ciclo sin fin de los minutos que pasan leyendo o escuchando algo; no quise volver tan rápido y permití que mis pies me llevaran a donde quisieran. Entonces doblé a la izquierda y en la esquina siguiente un poco más a la izquierda todavía y empecé a patear baldosas casi sin darme cuenta.

Mi mente ya había empezado, sin siquiera pedirme permiso, a pensar en lo que no debía, en lo que quería olvidar. "me vuelvo loco" creí. Pero no, la locura es otra cosa muy distinta y yo sabía que estaba diciendo boludeces. Como sé también que escapar (o intentarlo) a los pensamientos no es posible y entonces mejor seguir su corriente y ver a dónde nos terminan llevando, en qué orilla extraña nos depositan desorientados.

Yo quería que mis pasos me llevaran a tu puerta. Quería eso con el inconciente. Pero claro, tu puerta ni siquiera tiene dirección, no sé de qué color está pintada, desconozco cómo suena su timbre. Entonces no tenía sentido pretender llegar, como tantas otras cosas que no tienen sentido. En eso pensaba: En las cosas que no tienen sentido y que no tienen solución. En las situaciones en las que es mejor darle tiempo al tiempo y esperar. Pero a su vez, en que esa espera desespera, adormece pero a la vez despierta y de hecho me deja insomne tantas noches.

¿Por qué la necesidad de encontrarle sentido a todo? ¿Qué es lo que cambiaría en mi si supiera por qué motivo pasa tal o cual cosa? ¿Realmente cambiaría algo o sólo es un capricho saberlo? No poder controlar determinadas situaciones es lo que me angustia. Que todo esté librado a cualquier cosa menos a mis sentimientos y/o mis deseos. Entonces fue cuando vi que la aguja del reloj había girado 360 grados y que ya era demasiado tarde para caminar. Pero me di cuenta también, que aunque dejara de caminar no podía dejar de pensar, y que no hay escapatoria

Friday, January 11, 2008

Sabés muy bien que esos colores son viejos...

Aferrarte a una utopía,
sentirte extraño en alguien
que no te pertenece..
Quererla es entenderla...

¿Qué más hacer?
Si siempre te construiste un muro alrededor..
¿A dónde mirar?
Si ya no encuentro refugio en tus ojos..

La noche te lastima,
la circunstancia invita..
sangre, sacrificio
para las astillas que te roban
hasta el sueño de tenerla..

Me disfrazo de mi otro yo,
me escondo en mi mismo
y armo mil laberintos
deshaciendo las canciones que abracé..

Wednesday, January 09, 2008

Entender, querer, creer, cambiar, arriesgar, dejar, ser…

Como cuesta, eh. Realmente cuesta entender a la gente, por lo menos a mi se me hace difícil. Por supuesto que no todos somos iguales y ciertas personas son más fáciles de tratar que otras, pero intentar hacerlo no es para cualquiera.

Por momentos se me hace muy difícil. Por otros no tanto, y por otros, se me van las fuerzas para seguir adelante. Pero la vida tiene estas cosas, y una de ellas es entender y creer, no queda otra, y si el día de mañana te das la cabeza contra la pared, mala leche. Si diste todo lo que estaba a tu alcance nada más poder hacer.

Habrá que empezar a entender que alguien que no te demuestra lo que siente cuando debe, igualmente, te quiere y esta con vos, y que no lo hace por ser así o porque le cuesta. Habrá que empezar a sentirse importante uno mismo aunque el otro no siempre te lo haga sentir. Habrá que entender que no todos somos iguales y no todos queremos de la misma forma. Habrá que empezar a ser de otra manera para así no sufrir. Habrá que tomarse todo con más calma y actuar a imagen y semejanza de quienes tenes al lado. Habrá que entender que nuestra forma de manejarse en la vida no es la misma que la que tiene el de enfrente. Habrá que…muchas cosas.

Aunque lo mas importante es querer hacerlo, y a eso estoy dispuesto aunque por momentos me vengan ganas de tirar todo a la mierda y empezar a ser menos yo, menos Mariano, menos bueno con los demás.

Tardé pero me di cuenta que esto es así. Crees y sos feliz o crees para darte la cabeza contra la pared. El que no arriesga no gana, no? Todos arriesgamos con cada uno de los que nos rodean y ojala que todos ganemos como creo que haré yo.